
Mi única recomendación en este sentido es que no realices una conversión a la ligera, sino que apliques la técnica más apropiada en cada caso y que cuides otros ajustes como exposición, balance de blancos o nivel de enfoque antes de realizar la conversión.
¿Qué te ha parecido este post? ¿Prefieres las fotografías callejeras en sus colores originales? ¿O te inclinas por el blanco y negro? Te leo en los comentarios.